A Ciencia cierta
04 de abril de 2006
Francisco Hernández Martí­nez*

La investigación tecnológica y cientí­fica en México requiere una relación sólida entre universidad e industria, donde ambas fortalezcan ví­nculos de intercambio a fin de planear el desarrollo y la competencia tecnológica. No debe olvidarse que la competencia de una nación depende de la capacidad de su industria para innovar y modernizar.

Desafortunadamente, no se ha establecido tal relación en un contexto de crecimiento mutuo, al margen de preferencias polí­ticas y con beneficios no sólo para la economí­a sino para el sistema educativo. Inglaterra, Japón y EU han dado preferencia a los avances tecnológicos, base que los encumbra como paí­ses de primer mundo.

El primer paso es reconocer la importancia de la investigación en la innovación y el desarrollo industrial. EU ha identificado retos para consolidar esta relación, entre los que destacan:

1.- Mejorar la relación universidad-industria; equilibrar investigación básica y aplicada; y asegurar la diversidad de la investigación básica en varios campos.

2.- La relación debe ser flexible; las universidades deben buscar nuevas oportunidades para relacionarse con la industria, de manera que ambas se beneficien.

3.- En EU, sólo los servicios industriales registran más del 80 por ciento del PIB, generan empleos y son los principales usuarios de información tecnológica. Las universidades debe adaptarse a los sistemas de ingenierí­a industrial, para integrar áreas de investigación.

Un ejemplo que mide el impacto de la universidad en economí­a es el reporte del BankBoston (1997), que menciona que si las cuatro mil compañí­as establecidas por graduados y académicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts formaran una nación independiente, sus ingresos la convertirí­an en la economí­a 24 a nivel mundial. Estas compañí­as emplean a 1.1 millones de personas y tienen ingresos anuales de dos mil 420 billones de pesos.

Concluyendo, las universidades y las industrias mexicanas deben priorizar el enlace, lo cual motivará y proveerá una nueva plataforma en beneficio de la economí­a y, sobre todo, ayudará a fortalecer el avance tecnológico y cientí­fico.

La consolidación de ví­nculos es fundamental en el cambio de un paí­s en desarrollo, dando importancia a las necesidades presentes y futuras de la industria en cuanto a avances tecnológicos y cientí­ficos, a fin de competir en un mercado cada vez más globalizado.

*Investigador del Churchill College, Reino Unido.